Basta de Mordazas. Menos en la Universidad
Desde Jóvenes de Izquierda Unida Salamanca manifestamos una vez más nuestro apoyo y solidaridad con las cinco estudiantes multadas en la protesta que tuvo lugar durante la concesión del Honoris Causa a Jean-Claude Juncker el 9 de noviembre de 2017.
Entendemos el caso como una extensión de la injusta y mal llamada Ley de Seguridad Ciudadana, cuyo único fin es acabar con todo resquicio de militancia combativa. El movimiento estudiantil actual viene precedido por toda una trayectoria histórica de lucha que ha constituido, en gran parte de los casos, la vanguardia de los avances sociales. Por ello, consideramos de importancia capital la defensa de la universidad como un espacio crítico y de debate, libre de mordazas y de todo tipo de subyugaciones judiciales y económicas.
Estas protestas contra el adalid de la austeridad se saldaron con sanciones desorbitadas cuyo único fin es la desarticulación y criminalización de toda conciencia crítica. Sin embargo, una vez más, el leviatán se ha visto frenado por la solidaridad y la acción ciudadana. De un tiempo atrás, se ha creado una caja de resistencia con la que ayudar a las compañeras.
Desde el área joven de Izquierda Unida Salamanca hemos llevado a cabo una intensa actividad en oposición a esta ley mordaza y a las limitaciones de la libertad de expresión. Tras la realización de nuestras jornadas antirrepresivas en las que contamos con la participación de Cassandra Vera, Ana Sarrión y César Strawberry, continuamos abogando por la defesa de estos derechos fundamentales conquistados con sudor y sangre.
Con la celebración de nuestra fiesta en favor del colectivo LGTBI+ y entendiendo el Orgullo como una jornada de reivindicación y homenaje hacia los y las que durante mucho tiempo fueron reprimidos y reprimidas, donaremos parte de la recaudación a la causa de las cinco compañeras.
Gérard Biard dijo una vez que “la autocensura es el principio del totalitarismo”. Como Movimiento Político y Social hacemos un llamamiento a la colaboración y a seguir luchando. ¡Las mordazas son quebradizas pero nuestra conciencia es infatigable!
